Recuerdo aquel sonido causado por el roce de la madera en contacto con la suela de mis zapatos. Había viajado mas de 15 horas en avión para llegar al lugar en el que un tío abuelo me había dejado en herencia su apreciada mansión.
He de añadir que me imaginaba otro tipo de casa, no sé, quizá algo más moderna o más acorde con el siglo en el que vivimos. Una casa a la que se le pudiese añadir la palabra hogar.
Una de las primeras cosas que hice, fue abrir unos exorbitantes ventanales que iban desde el techo hasta el suelo del salón. Detrás de ellos, un amplio mirador curvado me esperaba. Me asomé, descansé mi cuerpo contra la fría balaustrada y contemplé el paisaje. Bastos campos contemplaban mis pupilas, pero no divisé ni un ápice de vida humana.
Una larga carretera de tierra se abría paso entre las altas secuoyas. Ni siquiera alcanzaba a ver la autopista, ni luces de algún pueblo cercano. Estaba sólo, con las estrellas titilantes observándome desde las alturas.
Fue en ese instante, en el que erróneamente afirmé, que volvería a mi piso céntrico de 30 metros.
Regresé al salón y subí por las escalinatas para visitar el resto de habitáculos, que para mi sorpresa, resultaron en cierta medida, acogedores. Decidí que pasaría la noche en una de las habitaciones más sencillas, y que en unos días, me largaría de allí colgando un bonito y enorme letrero de "se vende".
Aún así, esto que os cuento no es lo importante, ni la historia principal que os iba a contar. Veréis, como suele pasar en la vida, mis planes se vieron truncados y al día siguiente, conocí en el pueblo mas cercano a una mujer llamada Agar, que cambiaría mi destino por culpa de su mirada a lo "mona lisa".
Me quedé en tierras extrañas durante 16 largos meses y Agar, un buen día, desapareció de mi vida. Así, sin más. Malgasté el tiémpo buscándola, pues no había huella que seguir, ni camino que me acercara a su insondable rostro.
Ahora, os diré que me encuentro de nuevo en mi pequeño piso, que he regresado al mundo civilizado y que todavía no he logrado vender mi viejo palecete. Quizá tampoco lo desee del todo.
Hace unos días, entré en una pequeña librería en la que nunca antes había reparado y curiosamente, tropecé con un libro de nombres de mujer. Abrí la primera página y leí:
- Agar ( Hebreo) - Significado literal : "la que se fugó".
Y entendí entonces que el nombre le iba al pelo.
Cuantas Agar tendremos en nuestra vida que incansablemente buscamos..
ResponderEliminarme ha encantado.. besotes chica sigue asi
Muy bien relatado ¿crees que habria cambiado algo si su nombre hubiera sido otro?.
ResponderEliminarBesinos.
Siempre tendrás un sitio para volver a ese lugar tan bien descrito y quizás Agar haga caso omiso a su nombre.
ResponderEliminarBesos guapetona
Como me gustan tus relatos, gracias por regalarnos tus escritos y creo que todos en esta vida se cruza con "Agar"
ResponderEliminarUn abrazo del alma
Gracias a todos por leerme! Es un placer escribir cuando la crítica es buena ;)
ResponderEliminarFabia: Podría haberse llamado Genoveva y haberse largado en un barco, puesto que la traducción del nombre es "espuma de mar". Podría haberse llamado cualquier otra cosa, pero entonces la historia original que se me ocurrió no hubiese sido igual ;).
Besos a todos.
Complejo de Agar:
ResponderEliminarTendencia masculina o a veces inconsciente a clasificar a las mujeres en dos grupos: las buenas, puras e intocables a semejanza de la madre; y a las malas, aptas para la satisfacción sexual, pero indignas de amor. El hecho fue anotado por Freud y bautizado por la pscicoanalista francesa Maryse Choisy, aludiendo a un episodio bíblico: Sara, mujer de Abrahám, creyó que no podía tener hijos y autorizó a su esposo para que cohabitara con su esclava egipcia Agar, de la que tuvo un hijo llamado Ismael. Pero como más tarde Sara tuvo un hijo, Isaac, el patriarca expulsó de su casa a Agar el Ismael.
(Diccionario de Complejos)
Besotes, preciosa
Me quedó con la hermosa historia que hubo entre Agar y la o el protagonista, porque aunque se fuera, nadie le quitaría nunca lo hermoso de su romance.
ResponderEliminarUn abrazo
Mi querida amiga, en primer lugar déjame agradecerte tus comentarios, eres muy amable conmigo, tus opiniones las guardo como tesoros.
ResponderEliminarY en segundo lugar te diré, que este tu ultimo trabajo tiene una narrativa estupenda, de hecho siento que se asemeja a mi forma de entender el mundo… de escribir, para mi es muy grato descubrir a alguien como tu, con esa escritura tan inteligente y soñadora.
Tus trabajos desprenden ese veneno que se te mete de apoco a poquito en la sangre (destino corazón) no puedo mas que decirte que admiro muchísimo tu trabajo, de hecho llevo inmerso en tu blog toda la mañana… todos y cada unos de tus trabajos ¡soberbios! No se si eres consciente del talento que te rodea, pero ya te lo digo yo... eres una ESCRITORA
Una bonita historia y muy bien escrita y contada.
ResponderEliminarMe gustó mucho
Un beso
Pues sí, lo decía su nombre...
ResponderEliminarMe encanta como escribes.
El amor y el desamor... esa Agar, marchó sin dejar huella, precioso relato.
ResponderEliminarTu si que nos dejas tu huella, es lo que importa...
Un abrazo.
Como te lo digo? Que no te veo de seguidora en "Dedicatorias de una fotografia"
ResponderEliminarComo te lo digo?
Buen texto y la foto guaaaapisisisima!!!
Fuiste a por los premios, peros olo has pillado dos. Ainssss que te doy todos!!!!
Besos guapisima!!!
Querida creo que me perdi el anterior relato pero este me gusto mucho y me rei con el final ufff que cosas que tiene la vida o bueno la gente.
ResponderEliminarMis abracitos
Pero me escaparé para seguirte leyendo por ratitos.
ResponderEliminarCuídate (O.*)
Sí, cuantas Agar hay en nuestras vidas, y a pesar de todo siempre las echaremos de menos. Aunque algunas van y viene, mi kerida kolega.
ResponderEliminarComo te he dicho, la prosa es algo que dominas muy bien..
También sé que siempre te tendré al otro lado de este maravilloso mundo.
Un abrazo grande, por que yo no quiero llamarme Agar, si no ser la que vuelve a beber de tus palabras.
Un amor predestinado por un nombre. Un cuento precioso!
ResponderEliminarya te digo, que si le iba al pelo!!!
ResponderEliminar¿Miedo al compromiso?
Gracias por visitarme, la entrada mal que suene...es cojonuda...no existe expresion mas rotunda a la par que sincera, te sigo...
ResponderEliminarLa historia es fantástica, enhorabuena!
ResponderEliminarMe he quedado alucinado con el comentario de Reflexiones de Emibel, "Complejo de Agar"... um... muy muy interesante. Todo hombre busca una Agar y acaba con una clon de su madre.
Buena historia :)
ResponderEliminarBeso!